25/4/2021
En abril se ha desatado la segunda ola del covid19, en línea con el crecimiento de la pandemia en los países de nuestra región y en otras regiones del mundo (como en India). El Gobierno del Frente de Todos continúa con su política blanda hacia los de arriba, y con una línea mucho menos contemplativa con los intereses populares.
La postura de la derecha más reaccionaria, guiada por el Gobierno de la ciudad de Buenos Aires, es un ataque directo a la salud y a la vida de las mayorías populares.
Mientras crece el desencanto hacia la coalición de gobierno entre los sectores populares y progresistas, las luchas continúan pese a las dificultades sanitarias. Sigamos construyendo una alternativa popular y masiva para superar los problemas históricos de nuestro capitalismo dependiente
La pandemia y las vacunas: Una carrera con viento en contra
En nuestro país, el crecimiento de los casos del covid19 nos ha llevado al peor momento desde que comenzó la pandemia en marzo de 2020. Cada día aumenta el triste récord de personas infectadas y fallecidas, y los casos se acercan rápidamente a los 30.000 contagios diarios, sin contar el subregistro de miles y miles que se aíslan sin mayor control médico.
El sistema de salud se encuentra al borde del colapso sanitario. Las obras públicas realizadas por el Gobierno nacional y por el gobierno de la provincia de Buenos Aires para remendar un sistema sanitario en crisis han sido insuficientes, y quedan a la vista las medidas que la coalición del Frente de Todos no se animó a tomar en el momento oportuno: poner al sistema de salud privado y a las Obras Sociales a trabajar en forma conjunta con el sistema público como primer paso hacia un sistema público unificado; terminar con la superexplotación laboral de les trabajadores de la salud; impuestos permanentes y progresivos a las grandes empresas y a las grandes fortunas para financiar los gastos de salud y las necesidades económicas de las mayorías frente al agravamiento de la crisis.
Las medidas más específicas en la salud pública se vieron limitadas por las estrechas relaciones entre les funcionaries responsables del Ministerio de Salud con el negocio de la salud privada, mientras que las medidas más estructurales de cambios económicos significativos se ven limitadas por la concepción ideológica y política del equipo gobernante. No llegaron al Gobierno con vocación de enfrentar al poder real, sino para volver a intentar la política de conciliación con los de arriba, que ya fracasó en varias ocasiones desde el comienzo de los gobiernos constitucionales en 1983.
Seguimos atrás en la carrera por las vacunas
En la disputa entre el crecimiento de casos y la distribución de vacunas contra el covid19, lamentablemente sigue ganando la pandemia. La llegada de vacunas Sputnik V, Sinopharm y AztraZeneca viene aumentando, pero es insuficiente para protegernos del pico de la pandemia. Se ha vacunado cerca del 12% de la población, y todavía hay adultes mayores y personas con enfermedades preexistentes sin inmunizar.
Los anuncios de la producción en nuestro país de la vacuna rusa, bajo el nombre de Sputnik Vida, son un paso importante, pero aún no sabemos si cumplirán con la producción de vacunas a gran escala. Al mismo tiempo, este anuncio deja en evidencia la falsedad de los argumentos de Hugo Sigman y de les voceres oficiales en salud que hace pocos días decían públicamente que la Argentina no tenía capacidad técnica para producir los envases para los activos de la AztraZeneca que se produce en la planta de Garín. Queda claro que tanto Sigman como estes voceres nos mintieron para evitar enfrentarse a los grandes laboratorios y/o con los Estados Unidos. Finalmente, el propio Alberto Fernández ha salido a expresar su “malestar” por esta estafa sanitaria contra el pueblo argentino, sin tomar ninguna medida de fondo contra el laboratorio ni contra les responsables locales.
Como venimos señalando, y como denuncian desde la FESPROSA (Federación de Profesionales de la Salud) y otros sectores sindicales, sociales y políticos (http://prensafesprosa.blogspot.com/2021/04/la-produccion-nacional-de-vacunas-debe.html), la Argentina tiene capacidad técnica y personal humano en condiciones de producir vacunas e insumos de salud para afrontar la pandemia. Lo que sigue faltando es la decisión política del Gobierno del Frente de Todos de enfrentar a los grandes laboratorios (y al imperialismo que los sostiene políticamente).
Se agrava la crisis por arriba: la judicialización de la “presencialidad” educativa
Ante el avance de la pandemia, el Gobierno nacional firmó un nuevo Decreto de Necesidad y Urgencia (241/2021, del 15 de abril) planteando que las clases serían en forma “no presencial” hasta el 30 de abril en la ciudad de Buenos Aires y en todo el conurbano, e incrementando las restricciones para el uso del transporte público y para las actividades nocturnas. Desde el punto de vista de los intereses obreros y populares, consideramos que las medidas son correctas, pero claramente insuficientes: hacen falta medidas que limiten la circulación, y que al mismo tiempo garanticen que la mayoría de nuestro pueblo trabajador no pierda ni ingresos, ni trabajos, ni viviendas.
Esta medida del Gobierno desató una respuesta reaccionaria del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Larreta decidió desobedecer la disposición contra las clases presenciales, e inclusive está desobedeciendo un fallo de la justicia federal sobre el tema. Se supone que el fallo de la Corte Suprema (un espacio profundamente cuestionado tanto por las dos coaliciones políticas dominantes como por diversos sectores populares) saldará judicialmente esa cuestión.
De esta forma, se posiciona con claridad en la oposición por derecha…y desatiende conscientemente la salud y la vida de la población de la ciudad. Recordemos que, como ocurre desde el principio de la pandemia, la Capital es el distrito con más casos y más fallecimientos en términos porcentuales, y que el virus se ha difuminado desde la ciudad hacia el conurbano y hacia el conjunto del país.
La disputa judicial y política entre ambos Gobiernos sigue escalando, en una clara manifestación de la voluntad del poder real de condicionar lo más posible al gobierno del Frente de Todos. Nuevamente, se repite una situación común en los últimos años: los poderosos golpean a un Gobierno que quiere negociar, el Gobierno retrocede, y los que mandan de verdad vuelven a apretar las clavijas. En su inmensa mayoría, el “Poder Judicial” (que es preciso no confundir con la verdadera justicia) sirve en forma permanente a los intereses políticos y económicos de los sectores más reaccionarios, mostrando lo que todes sabemos: que está diseñado para ellos, y no para una justicia real y efectiva para toda la sociedad.
La única forma para salir de estos “aprietes” es denunciando con firmeza las políticas reaccionarias y convocando a la participación y al debate a las mayorías. Pero esa no es la conducta política de la coalición gobernante del FdT.
Frente a esa disputa por arriba, que disparó una crisis política aún abierta, la lucha de les docentes de la Ciudad contra la “presencialidad educativa” es el principal camino para cuidar la salud y la vida de les pibes y de toda la población.
El pantano de la deuda y la profundización de la dependencia
Como ya señalamos en notas anteriores, está estancada políticamente la negociación entre el Gobierno nacional y el FMI. Cada vez son más los sectores afines al Gobierno que hacen trascender su disconformidad con estas negociaciones. Se hace evidente para los sectores más sensatos del FdT que la deuda externa no se podrá pagar, ni siquiera consiguiendo el muy improbable plazo de 20 años en una “renegociación exitosa”.
Es imprescindible avanzar en la suspensión inmediata de pagos y en una profunda investigación independiente de toda la deuda (incluyendo tanto a la deuda en bonos ya renegociada como a la deuda contraída por el Gobierno de Macri con el Fondo).
Como viene planteando Eduardo Lucita (http://www.laarena.com.ar/opinion-luces-y-sombras-de-la-negociacion-con-el-fmi-2170566-111.html), la denuncia del Gobierno contra Macri y sus funcionarios por la gigantesca deuda contraída con el FMI es un paso necesario, que debería avanzar en la denuncia contra los beneficiarios de esa deuda (es decir, los fugadores seriales de divisas) según lo señalado en el informe del Banco Central sobre Formación de Activos Externos 2015-2019. También hay que juzgar a los funcionarios del propio Fondo, aún cuando tengan una legislación internacional que les asegura impunidad jurídica. En el difícil contexto actual, es muy posible que el Gobierno suspenda la negociación con el Fondo hasta después de las elecciones parlamentarias.
Al mismo tiempo, es absolutamente lógico que mientras se investigue se suspenda cualquier tipo de pago de la deuda. Seguimos reafirmando el camino que adoptamos junto a las organizaciones compañeras del Movimiento de los Pueblos al participar en la Autoconvocatoria por la suspensión de pagos e investigación de la deuda. Dejar de pagar esta deuda eterna, absolutamente ilegítima, es una evidente necesidad para recuperar las condiciones de vida de nuestro pueblo trabajador y los intereses nacionales.
Por el río Paraná se desangra nuestro país
Estamos a pocos días de la finalización de la concesión de la “Hidrovía”, la empresa armada para extraer nuestras riquezas al exterior, con mínimos controles estatales, en completo beneficio de las grandes exportadoras agropecuarias, mineras y ganaderas. Como ya hemos dicho en notas anteriores, por esta vía sale más del 70% de las exportaciones de nuestro país, favoreciendo la subfacturación y el contrabando, y se consolida un modelo económico dependiente, extractivista y “primarizador”, responsable directo de la pobreza y del hambre que sufrimos desde las mayorías populares.
El 30 de abril vence esta concesión, que viene desde la década infame del menemismo, y en el Gobierno no parece haber voluntad política de cambiar de rumbo, a pesar de los importantes cuestionamientos dentro del propio Frente de Todos.
Desde el MULCS somos parte de los sectores que luchamos contra la nueva licitación de nuestras vías navegables, y estamos a favor de una empresa estatal de dragado y balizamiento y por la estatización de todos los puertos, como un primer paso hacia el control del comercio exterior de la Argentina. Desde esa perspectiva, integramos el Frente por la Soberanía Nacional, y fuimos parte de la jornada de lucha del lunes 26 de abril contra la entrega de nuestros ríos y nuestras riquezas (http://mulcs.com.ar/index.php/2021/04/23/jornada-nacional-de-lucha-por-la-soberania-fluvial-y-portuaria/), impulsando una importante Radio Abierta en Tigre.
Las luchas obreras y populares siguen a pesar de las dificultades
Las mayores restricciones de circulación por la pandemia ponen nuevos límites a las luchas masivas. Como ejemplo concreto de esta limitación, los movimientos territoriales venían creciendo su nivel de movilización y la segunda ola desatada en abril puso un freno a esta masividad. En la jornada del pasado 18 de marzo participamos 30.000 compañeres, y en la siguiente movilización del 8 de abril se había duplicado la cantidad de compañeres.
Sin embargo, las luchas obreras y populares siguen adelante porque las reivindicaciones obreras y populares no encuentran respuestas frente a los despidos, los bajos salarios ante la inflación creciente, la precarización, el hambre y la pobreza. Este próximo 27 de abril los movimientos territoriales marcharemos al Ministerio de Trabajo reclamando ante el Consejo del Salario por un “Salario Mínimo, Vital y Móvil” que realmente cubra la canasta familiar (http://mulcs.com.ar/index.php/2021/04/25/27-de-abril-los-movimientos-piqueteros-y-de-desocupades-marchamos-al-ministerio-de-trabajo-a-la-reunion-del-consejo-del-salario-y-realizamos-ollas-populares-y-cortes-en-todo-el-pais/). También movilizaremos en distintos municipios, manteniendo el cuidado y el distanciamiento social ante el pico de la pandemia.
Recordemos que la canasta necesaria para no caer en la pobreza supera los 60.000 pesos mensuales, mientras que el salario mínimo apenas supera los 20.000 pesos. Como dice Villalobos en su nota de Tiempo Argentino (https://www.tiempoar.com.ar/nota/salario-minimo-la-cgt-y-las-cta-aun-no-definieron-su-planteo), el salario mínimo ha sufrido una pérdida de más del 40 % de su poder adquisitivo desde 2017, e impacta en el monto de los planes sociales que cobran miles de compañeres (que es la mitad del SMVM). Nuevamente la mayor pobreza y la precarización laboral recaen sobre las mujeres del sector más castigado de nuestro pueblo: la pobreza discrimina aún más por género, y las tareas de cuidado y reproducción de la vida siguen recayendo abrumadoramente sobre las mujeres de nuestras familias empobrecidas.
Sigue en pleno desarrollo la heroica lucha de les trabajadores autoconvocades de salud en Neuquén contra el aumento salarial miserable del 15 %, las luchas de sectores del transporte (http://mulcs.com.ar/index.php/2021/04/25/corte-de-ruta-y-protesta-de-los-trabajadores-de-la-linea-60/), de distintos sectores de salud y educación en distintos lugares de nuestro país, y las luchas contra el extractivismo minero continúan su desarrollo, como ocurre en Andalgalá a pesar de la represión del Gobierno pro minero de Catamarca (http://mulcs.com.ar/index.php/2021/04/22/laguna-de-rocha-y-andalgala-el-agua-es-vida-video/).
Para que las luchas de nuestro pueblo trabajador sigan avanzando es imprescindible avanzar en la construcción de una alternativa popular, desde abajo, que contenga todas las necesidades populares en un programa de respuestas efectivas y colectivas contra el capitalismo dependiente y el imperialismo que nos dominan.
Avanzar en la construcción de una alternativa popular y de masas
Desde el MULCS trabajamos todos los días en esta línea política. Cada paso que damos, incluso los más pequeños, está guiado por esta estrategia política. La construcción de un amplio movimiento político popular, antiimperialista y anticapitalista, feminista y desde abajo, con vocación de poder, es nuestra estrategia.
Sabemos que las luchas obreras y populares son fundamentales, y que nuestro país tiene una larga tradición de luchas que se remonta a lo más profundo de nuestra historia obrera y nacional. Pero también sabemos que para triunfar contra nuestros enemigos de siempre es imprescindible construir una alternativa propia de las y los de abajo, que supere las limitaciones estructurales de los sectores que buscan conciliar siempre los intereses del gran capital y de los sectores populares.
En este marco, seguimos trabajando en el debate político fraternal con las organizaciones compañeras del Movimiento de los Pueblos: Por un socialismo feminista desde abajo, con un conjunto de organizaciones cercanas, y con todos los sectores obreros y populares dispuestos a actuar y construir en conjunto un programa y una alternativa como precisa nuestro pueblo trabajador.