8/9/2021
El 12 de septiembre próximo tendrán lugar las elecciones Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) en un escenario de profunda crisis económica y social, agudizada al extremo por el impacto de la pandemia, que sumergió en la pobreza a la mitad de la población en nuestro país, profundizando la precarización laboral.
Un marcado desinterés frente a una campaña carente de propuestas y debates políticos de fondo; y un indisimulable malestar por el derrumbe de las condiciones de vida de las mayorías populares, parecen ser, por el momento, las principales reacciones frente a unos comicios de medio término que no logran entusiasmar siquiera a los núcleos más firmes de adhesión de los dos principales bloques políticos: el Frente de Todos, y la coalición de la derecha más dura ahora encarnada en Juntos.
Una polarización que sigue firme
Más allá de las crisis internas de ambas coaliciones, las elecciones volverán a mostrar un escenario sumamente polarizado, una característica de la etapa que llegó para quedarse y que obstaculiza el surgimiento de otras opciones por fuera de esa confrontación mutuamente funcional.
Por un lado, se visualiza a un gobierno nacional que puede mostrar pocos logros destacables en sus dos años de gestión, que sigue disciplinadamente los dictámenes del FMI que implican ajuste, recortes salariales y que profundiza un modelo extractivista para hacer frente a los pagos de la deuda, y que busca ofrecer alguna perspectiva de futuro con el slogan “La vida que queremos”. No obstante, el recurso de marketing no alcanza a desviar la atención sobre los estragos sociales profundizados durante la crisis sanitaria que hace largo tiempo se le fue de las manos.
En contrapartida, la derecha macrista con el radicalismo a la rastra, pretende capitalizar la crisis política del PJ en el gobierno, levantando un programa netamente patronal, antiobrero y flexibilizador que, con el cuento de la modernización de la economía, pretende dejar el campo liberado para una ofensiva del capital de tierra arrasada.
El crecimiento relativo de las expresiones más alocadas y recalcitrantes de una derecha liberal-fascista (Milei, Espert) refleja el desencanto de una franja del electorado (expresión local de una tendencia internacional) que cuestiona al macrismo por no haber ejecutado brutalmente un programa económico de shock que, en la Argentina, sólo podría aplicarse con los tanques en las calles y una represión brutal.
En las PASO votamos al Frente de Izquierda – Unidad
En este escenario, el estancamiento y la fragmentación de las diferentes fuerzas de la izquierda anticapitalista (caracterización de la que no podemos excluirnos) es otro indicador de la coyuntura. Esta limitación condiciona sin duda el desenvolvimiento de una alternativa política obrera y popular de profunda transformación social, que concite el interés de amplios sectores de nuestro pueblo trabajador, con un programa anticapitalista, antiimperialista, feminista, popular, y en defensa de nuestros bienes comunes, contra el saqueo y la contaminación.
Las organizaciones que suscribimos esta declaración consideramos que esa opción política de emancipación sigue siendo un desafío por alcanzar y apostamos a ser parte de su construcción en un camino de creciente coordinación con otras fuerzas del movimiento popular.
Ante la coyuntura electoral, llamamos a votar a las listas del Frente de Izquierda y de los Trabajadores – Unidad, más allá de las importantes diferencias y críticas que tenemos en muchas ocasiones con sus prácticas. Sentamos esta posición, con el objetivo de fortalecer una voz de defensa de las necesidades e intereses fundamentales de la clase trabajadora y los sectores populares, en disputa también con las variantes ultra-derechistas que buscan canalizar hacia esas salidas reaccionarias la disconformidad creciente frente a ambas coaliciones políticas dominantes. A pesar de sostener ese apoyo desde hace varias elecciones, entendemos que es imprescindible ampliar y renovar las propuestas político – electorales de la izquierda. Se trata de desarrollar los ejes programáticos y de acción que se reivindican, para llegar a otros sectores de nuestro pueblo. Para disputar el corazón y las ideas de las mayorías, hay que proponerse como alternativa de poder contra el poder permanente de quienes son claramente los enemigos de la clase trabajadora.
Al mismo tiempo, creemos que es importante prestar atención a la disconformidad creciente de sectores importantes de nuestro pueblo, que se está expresando en un menor nivel de participación electoral y en un mayor desinterés. Una alternativa desde la izquierda debe escuchar y comprender ese malestar popular para ayudar a potenciarlo en resistencia y organización desde abajo.
Apostar por una alternativa obrera y popular
En tanto, en el largo aliento continuaremos apostando al desarrollo del protagonismo popular, al triunfo de las luchas que emprende nuestro pueblo y sus esfuerzos por romper con las cadenas de la dependencia imperialista. Por la recuperación de la soberanía sobre todas nuestras riquezas y bienes comunes, que debemos ser capaces de preservar en pugna con el modelo extractivista y de saqueo. En este sentido, creemos esencial suspender los pagos e investigar realmente la deuda externa generada por los mismos sectores concentrados que siempre se benefician a costa de nuestra soberanía y de nuestro pueblo trabajador.
Vamos por los avances de nuestra clase trabajadora, por nuevos triunfos y conquistas del movimiento de mujeres y disidencias, que ya hizo historia y que continuará escribiendo nuevos capítulos.
En esa huella de múltiples afluentes continuaremos transitando para forjar una salida propia de las, los y les de abajo, que más temprano que tarde seremos capaces de alumbrar como alternativa para la mayoría de nuestro pueblo. Vamos por una salida popular a la crisis, desde abajo y a la izquierda
. Corriente Social y Política Marabunta
. Hilo Rojo – Colectivx militante
. Movimiento de los Pueblos: Por un socialismo feminista desde abajo (Frente Popular Darío Santillán – Corriente Plurinacional / Izquierda Latinoamericana Socialista / Movimiento por la Unidad Latinoamericana y el Cambio Social / Movimiento 8 de Abril)