Frente a la pandemia y a la crisis capitalista, la salida es colectiva: solidaridad, organización y lucha
Nuestro día: el origen del 1° de mayo
El 1 de mayo se conmemora a nivel mundial el Día internacional de las trabajadoras y los trabajadores en homenaje a un grupo de anarquistas que fueron ejecutados en 1886 en Chicago, Estados Unidos, conocidos como los Mártires de Chicago. El movimiento obrero de esa época luchaba por las 8 horas de trabajo: “Ocho horas para el trabajo, ocho para el sueño y ocho para el ocio” era la consigna. Esta lucha fue fundamental en esa etapa.
Por aquellos años, miles de personas trabajaban en grandes fábricas sin ningún tipo de regulación o derecho laboral y bajo condiciones de explotación extremas. Las jornadas de trabajo se extendían hasta 18 horas diarias por salarios miserables.
A raíz de esto, se acordó llevar adelante una huelga general para reclamar la jornada laboral de 8 hs. El 1° de mayo de 1886, casi medio millón de trabajadores en todo Estados Unidos se unió al paro y las protestas se extendieron durante varios días. Esa lucha consiguió el derecho a las ocho horas por primera vez en la historia del movimiento obrero.
Desde 1904, se realiza el 1° de Mayo como día internacional de las trabajadoras y los trabajadores, como un día de lucha por nuestros derechos.
¿Cómo nos encuentra hoy?
Este 1° de mayo nos encuentra a lxs trabajadorxs sufriendo las consecuencias de la pandemia del covid19, la crisis sanitaria, y la crisis económica, que provoca el capitalismo depredador.
Los problemas que ya padecíamos hoy se profundizan: falta de elementos de seguridad e higiene necesarios en nuestros lugares de trabajo, casas y espacios comunitarios; la imposibilidad de acceso a una vivienda digna, a una salud pública de calidad, a la educación pública, a un ingreso acorde a la canasta básica; los numerosos despidos, las rebajas salariales, las suspensiones y el aumento de la desocupación.
Esta crisis viene a acentuar las condiciones paupérrimas de relaciones laborales frágiles y explotadoras que incitan al individualismo y al “sálvese quien pueda” y que, en particular, afectan a millones de trabajadores precarizadxs y desocupadxs, a las mujeres, lesbianas, travestis, trans, bisexuales y otras identidades sexuales.
En nuestros hogares, a las presiones laborales del “trabajo en casa” o teletrabajo, se sumaron la multiplicación de “tareas de cuidado”, producto de un sistema patriarcal que se expresa en su máxima potencia con los numerosos casos de femicidios y travesticidios que no llegamos ni a contabilizar.
Las experiencias que estamos viviendo lxs trabajadores de la educación a partir del “teletrabajo” ya nos permiten sacar algunas conclusiones: el funcionamiento del sistema educativo no se sostiene a través de relaciones virtuales. Se sobrecarga la tarea docente y se profundizan las desigualdades socio-económicas que ya existen en la población de nuestras escuelas obligando a lxs estudiantes a ser parte de una «continuidad pedagógica» en la que «sobrevive el más apto”. Lxs docentes que nos organizamos y problematizamos esta situación decimos que el uso de dispositivos tecnológicos no reemplaza el vínculo pedagógico que piensa colectivamente y construye una educación transformadora.
Lxs trabajadorxs de la salud sufrimos especialmente la falta de insumos y de materiales de protección ante el covid19, el incremento de las horas de trabajo, y un extremo stress laboral, ante las políticas antiobreras de las patronales de la salud privada y la indiferencia cómplice del Estado. Lxs millones de trabajadores de la salud tenemos un enorme compromiso ante la situación sanitaria y social, y necesitamos urgentemente insumos y materiales de protección, aumentos salariales, estabilidad laboral plena, los mismos derechos que necesitábamos antes de la crisis del covid19.
Miles y miles de trabajadorxs en los comedores populares la pelean frente al hambre en nuestros barrios. Miles de trabajadorxs de niñez, de seguridad social, de atención a la vejez, y tantas otras y otros, la pelean cada día.
A pesar del aislamiento, hay muchísimas luchas de trabajadorxs, contra los despidos y suspensiones, por condiciones de salud laboral, contra las rebajas salariales y la mayor extensión del horario laboral. Estas luchas, invisibilizadas por los medios masivos y con las dificultades de movilización que nos impone la situación, muestran la enorme fuerza de nuestro movimiento obrero. El acuerdo por la rebaja salarial del 25%, que firmaron la CGT con la UIA y el Gobierno nacional, a cambio de impedir los despidos, es una nueva traición de la dirección de la CGT a la mayoría obrera y popular. Las luchas por el salario y por las condiciones de trabajo son hoy más necesarias que nunca.
En este contexto, el Gobierno sigue adelante con la renegociación de la deuda externa, intentando acordar con el capital financiero. Hoy más que nunca, decimos que no hay que pagar la deuda odiosa e ilegítima, que hay que suspender los pagos de esa deuda, para investigarla profundamente y que los responsables de esa estafa sean juzgados.
Las mismas imágenes se reproducen en cientos de países: la flexibilidad laboral, el ajuste, décadas de desinversión en políticas públicas, y la concentración de riquezas en unos pocos.
La única salida posible de la crisis capitalista debe ser comunitaria, colectiva y solidaria, hacia otro sistema de relaciones de producción y distribución, que termine con las desigualdades y las opresiones de clase, género, raza y discriminaciones sobre millones de migrantes en todo el mundo, un mundo sin explotadores ni explotadxs.
El mundo se mueve por lxs trabajadores: POR UN PRIMERO DE MAYO DE TODES LXS TRABAJADORXS
. NI DESPIDOS, NI SUSPENSIONES, NI REBAJA SALARIAL
. SUSPENSIÓN DEL PAGO E INVESTIGACIÓN DE LA DEUDA EXTERNA
. SALARIO DE EMERGENCIA PARA PRECARIZADES Y DESOCUPADES
. UNIDAD, ORGANIZACIÓN, LUCHA Y SOLIDARIDAD
. QUE LA CRISIS LA PAGUEN LOS DE ARRIBA
Movimiento de los Pueblos: Por un
socialismo feminista desde abajo (Frente Popular Darío Santillán –
Corriente Nacional / Izquierda Latinoamericana Socialista /
Movimiento por la Unidad Latinoamericana y el Cambio Social /
Movimiento 8 de Abril)
30-4-2020