Posted on: 25 agosto, 2020 Posted by: MULCS Comments: 0

25/8/2020

El 4 de agosto, el Ministerio de Economía anunció que llegaba a un acuerdo de palabra con los principales tenedores de bonos de deuda, el cual deberá ratificarse el 24 de agosto.

Efectivamente, se confirma que el pago de la deuda es una política de Estado permanente, gobierne quien gobierne, y que en cuanto a este aspecto hay un pleno acuerdo entre las principales fuerzas políticas del sistema. El Gobierno del Frente de Todos asumió en diciembre pasado con la voluntad explícita de renegociar y pagar las deudas dejadas por la gestión anterior. La dependencia financiera sigue siendo un punto nodal de nuestra dominación, que no se cuestiona.

El gobierno presentó el principio de acuerdo como un verdadero triunfo. Incluso sectores de Juntos por el Cambio como el ex ministro de Finanzas Nicolás Caputo aplaudieron dicho acuerdo. Frente a un contexto de crisis internacional, de fuerte recesión profundizado por la pandemia y una perspectiva de estancamiento para los próximos años, el gobierno obtiene cierto aire para intentar recomponer la economía. Un deseo que será bastante difícil de corroborar.

Con este principio de acuerdo, se reconocen 68.000 millones de dólares, cerca de un quinto de la deuda pública. Frente a la propuesta inicial elaborada por el ministro de economía Martín Guzmán, el gobierno nacional fue cediendo a la presión de los acreedores. El arreglo se resume en una insignificante reducción en el capital adeudado (apenas un 2%), una rebaja en la tasa de interés promedio que se coloca en el 3% frente a una tasa anterior del 6%, pero que frente a la situación de la economía internacional es extremadamente alta, y una postergación del cronograma de pagos que en definitiva sólo patea el problema hacia adelante.

¿Cuáles son los objetivos centrales que serían logros para el gobierno? En primer lugar, postergar los pagos hasta el próximo período de gobierno, para garantizarse supuestamente mayores recursos financieros para la actual gestión del Frente de Todos. En segundo lugar, un objetivo permanente desde la última etapa del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner: tener pleno acceso al mercado de capitales. Por eso, las principales cámaras empresariales festejaron el 9 de julio junto con Alberto Fernández. Es la contrapartida de un verdadero proyecto independentista. Este no es el camino para combatir al neoliberalismo.

El siguiente paso será la negociación con el FMI. Tanto Alberto Fernández como Martín Guzmán dicen que el Fondo ha cambiado su política y que es más contemplativo con las necesidades de los países endeudados. Sin embargo, el ejemplo de Grecia no parece ser la muestra de que esto sea así. Sumado a esto, el FMI no acepta quitas, sólo postergación de pagos. ¿Cuál será la gran novedad de un organismo que sigue respondiendo a los intereses del imperialismo, especialmente de EEUU? Estamos convencides que un acuerdo con el Fondo implicará un control por parte del organismo de las políticas económicas nacionales, junto con la exigencia de reformas estructurales ya planteadas anteriormente, como la reforma laboral o un nuevo régimen jubilatorio.

El otro gran acuerdo de política estatal es la continuidad del modelo extractivista. El anuncio del Plan Minero nacional, y la carta de intención para un acuerdo con China de la mano de Felipe “Agronegocio” Solá, dan la pauta de cuáles son las expectativas que tiene la coalición gobernante respecto de dónde sacar los dólares para pagar la deuda.

Pero la carga pesada de la deuda no remite a los cuatro años macristas. La deuda externa sigue siendo una traba estructural y una herramienta de sometimiento para una política de verdadera soberanía. Ya desde la última dictadura militar, y los gobiernos que le siguieron, la política fue de reconocer contante y sonante, dólar por dólar, una ilegal, ilegítima y fraudulenta deuda externa que ha dilapidado las riquezas producto del esfuerzo de la clase trabajadora.

Es por eso que decimos que la deuda es con los pueblos, y no con los fondos usureros ni con el FMI. Es por eso que somos parte de la Autoconvocatoria por la Suspensión del pago e Investigación de la deuda, que desde el principio de la negociación viene planteando la necesidad de una investigación que pueda determinar los negociados que se han realizado.

Es por eso que estamos convencides de que el único futuro para nuestro pueblo trabajador es suspender todos los pagos mientras se realiza una investigación exhaustiva de la deuda pública. Estamos convencides que por ese camino se reafirmaría el no pago de la deuda externa, que es profundamente ilegítima. Mientras se paga la deuda se empieza a ver el colapso del sistema de salud en parte de nuestro territorio, así como los déficits de un sistema educativo que deja por fuera a millones de niñes.

Es una tarea importante debatir el sentido común de que las deudas se pagan, de que los negociados de los diferentes gobiernos deben ser afrontados con los padecimientos de nuestros pueblos, a través de la explotación de la naturaleza, del ajuste patriarcal sobre las mujeres y las disidencias, de la mayor explotación de la clase trabajadora, del sometimiento de las comunidades y los pueblos originarios y migrantes, del sufrimiento de las niñeces, del pesar de nuestres jubilades. Enfrentemos este destino, no como algo indefectible, no como la única salida posible, sino como la perspectiva de los poderosos. Hay que enfrentarla con el refuerzo de una campaña que cuestione profundamente la legitimidad de la deuda y con la movilización popular que pueda ponerle freno a este saqueo.

Suspensión del pago e investigación de la deuda 

No al pago de la deuda ilegal, ilegítima y fraudulenta

La deuda es con los pueblos, no con los fondos usureros ni con el FMI

Primeras firmas:

  • Corriente Social y Política Marabunta
  • Frente Popular Darío Santillán
  • Movimiento de los Pueblos: Por un socialismo feminista desde abajo (Frente Popular Darío Santillán – Corriente Plurinacional / Izquierda Latinoamericana Socialista / Movimiento 8 de Abril / Movimiento por la Unidad Latinoamericana y el Cambio Social)
  • Venceremos – Partido de Trabajadorxs
  • Corriente Nacional Emancipación Sur
  • Las Floras Libertarias. Marcos paz
  • Democracia Socialista, Organización Revolucionaria Guevaristas, Corriente Política de Izquierda, Abriendo Caminos
  • Eduardo Lucita – Economistas de Izquierda
  • Enrique Gandolfo – Secretario General de CTA Bahía Blanca y Secretario de Formación de SUTEBA Bahía Blanca.