Reproducimos nota de Autoconvocatoria por la Suspensión del Pago e Investigación de la Deuda
06/04/2022
En medio de la conmoción política generada en torno al “acuerdo” de refinanciación con el FMI que se expresó desde la masiva oposición en las calles hasta las divergencias puestas de manifiesto dentro del propio bloque oficialista, que no tradujo en acción de movilización de sus bases, un grupo de senadoras y senadores del Frente de Todos han presentado dos proyectos de ley buscando «dar vuelta la página”. El primero crearía un fondo para pagar al FMI con lo recaudado a través de un impuesto extraordinario sobre los capitales fugados del país, sin haber sido declarados ante el fisco. El segundo proyecto limitaría el “secreto bancario” impuesto con la Ley de Entidades Financieras, vigente desde la dictadura genocida de 1976, y otras normas del sistema financiero especulativo.
Desde la perspectiva construida en la Autoconvocatoria por la Suspensión del Pago e Investigación de la Deuda, nos pronunciamos a favor de aplicar mayores controles e impuestos a los sectores más enriquecidos de la sociedad, en especial a los “fugadores seriales”. Son los que se aprovechan hace décadas del endeudamiento estatal, de los subsidios y exenciones, sometiendo a nuestro país a un nivel aún mayor de dependencia económica y política y a nuestro pueblo trabajador a mayores niveles de pobreza y precarización.
Afirmamos la necesidad de aplicar medidas que sirvan para debilitar al capital financiero que domina la economía de nuestro país desde los tiempos de la dictadura, incluyendo el cuestionamiento al “secreto bancario”. La investigación de las cuentas de argentinos en el exterior debe servir para sancionar a los responsables de la enorme fuga de capitales, en la que tuvo una participación relevante el crédito del FMI. Apoyamos, asimismo, que la Comisión bicameral de seguimiento y control de la gestión de contratación y pago de la deuda exterior de la Nación, del Congreso Nacional, asuma el rol protagónico que le corresponde, independiente del Poder Ejecutivo, con representación pluripartidaria y abierta a la participación ciudadana.
Desde nuestra perspectiva no podemos aceptar que se plantee como destino de los recursos eventualmente recuperados el pago al FMI. Las estafas no se pagan y la impunidad de los estafadores tiene que terminar. El préstamo acordado por el FMI al gobierno de Mauricio Macri en 2018 es nulo por ser ilegal, ilegítimo y odioso, y el Fondo Monetario Internacional al otorgarlo es corresponsable de la comisión de una ilegitimidad. Corresponde declarar su nulidad.
La reciente aprobación parlamentaria de una ley autorizando el refinanciamiento de aquella estafa no la transforma en legítima ni la dota de una legalidad que nunca tuvo. Solo suma una nueva capa de complicidad de parte de quienes se han negado a asumir sus responsabilidades constitucionales y en materia de derechos humanos para investigar la deuda y dejar de pagar lo que los pueblos de la Argentina no deben. Denunciar el nuevo acuerdo, suspender los pagos, investigar la deuda, sancionar a los responsables y exigir la restitución de la riqueza mal habida o fugada es el único camino posible para quebrar el predominio extractivista del sistema de la deuda perpetua, recuperar la soberanía y poder avanzar con las transformaciones económicas necesarias para poner primero lo primero: saldar la deuda con los pueblos y la naturaleza.
Lejos de crear un “fondo para pagar al Fondo”, los recursos que puedan recuperarse, de la fuga, la evasión, el contrabando, el extractivismo, deben ser dedicados a un “Fondo para la cancelación de la Deuda con los Pueblos y la Naturaleza”, para resolver los problemas urgentes que afectan al pueblo trabajador en nuestro país: la desocupación, los bajos salarios, la inflación, la falta de alimentos, la falta de acceso a la salud y a la educación públicas, la defensa de nuestros bienes comunes y del ambiente contra el modelo extractivista. Un fondo diseñado sobre la base de la participación y propuestas de las personas, pueblos y guardianas/es de la naturaleza cuyos derechos el FMI, la deuda y los fugadores de capitales han violado en forma sistemática.
A estos recursos recuperados de la estafa de la mal llamada «deuda», deben sumarse los que provengan del firme impedimento a futuro de nuevas fugas al exterior, contrabando, elusión fiscal, saqueo de la naturaleza y de los bienes comunes naturales y construídos.
Como plantea Nora Cortiñas, referenta de esta Autoconvocatoria, los recursos económicos deberían servir para garantizar el derecho a la comida, la salud, el agua y la educación para todas y todos les niñes de nuestro país, en momentos en que más del 50% de las niñeces se encuentran en situación de pobreza, y casi el 40% de nuestro país es pobre. La verdadera deuda es interna: con los pueblos, les trabajadores, con nuestros bienes y territorios comunes.
Sea para rechazar al FMI y los crímenes de la deuda, o para lograr sacarle dólares a les fugadores seriales y asumir como prioridad la urgencia de saldar la deuda interna, es necesario fortalecer la organización y movilización popular, así como la unidad en acción. Por eso llamamos a mantener y profundizar la más amplia movilización frente a la continuidad de la estafa y en especial, ante la próxima llegada de la misión de “revisión” del Fondo Monetario Internacional, para rechazar su injerencia y políticas y cada medida de ajuste antipopular a favor de los supuestos “acreedores”. Nuestro pueblo trabajador tiene una larga experiencia de lucha y resistencia contra el capital expoliador. Llamamos a sumar fuerzas a nivel nacional e internacional en ese sentido, reclamando la inmediata libertad de los compañeros detenidos en la lucha contra el Fondo Monetario y la sanción ejemplar contra los fugadores y otros responsables de la estafa.
La Deuda es con los Pueblos y la Naturaleza, no con el FMI ni con los especuladores financieros
Autoconvocatoria por la Suspensión del Pago e Investigación de la Deuda